domingo, 25 de abril de 2010

La Nada

La Nada, sumergida en la nada misma.

Chapotea un poco y juega con sus pies

Se empapa con sus propios excesos

Se vanagloria en la abundancia de su escasez.


La Nada sumergida en esa nube de nada.

La Nada ya no se sorprende de nada,

Ya esta curada con su propio espanto.


Nada. Nada para decir, nada para sentir.

La Nada ya conoce su esencia precaria y vacía

La Nada te inunda de su nada

Te tortura, te angustia con tanta nada

Es letal conocerla (conocer tanta nada)

Es mortífera, es dañina, es nada en su máxima expresión




Tanta Nada, para no sentir nada.