jueves, 23 de junio de 2011

Simpleza.

Desde este lado, todo se ve peor.
Mas perverso.
Mas confuso.
Mas real

Desde acá, ya nada me parece natural.

No quiere doler, y duele igual.
Duele cuando estoy bien.
Duele cuando estoy mal.

Desde este lado,
Nada es circunstancial.
Yo no quiero más promesas.
Quiero realidad.

Desde acá, se ve la precariedad.

Sensaciones que no siento mas
Miradas que ya no ven mas

Desde este lado,
Sólo veo una mitad.
El todo, el uno
Hace rato se perdió ya.

domingo, 12 de junio de 2011

Nostalgias.

Si quedara tiempo aún para reconquistarnos…

Para teñir nuestras vidas de rosa romántico; para redescubrirnos en un simple pero cotidiano gesto. Para renovarnos y salir del pozo ilesos y airosos.

Si existiera tiempo para sorprendernos mutuamente

Para despojarnos de las diferencias; para encontrar la manera de subsanar nuestras falencias.

Para detener la vorágine diaria, el rudimentario mundo que vivimos y quedarnos solos. Frente a frente, desnudos de versatilidades, sólo con el sentimiento primitivo.

Si tuviéramos tiempo para rescatar el amor que nos abunda de lo profundo. Hacerlo valer lo que vale.

Para prevenir la decadencia de la que ya somos parte.

Si encontráramos voluntad verdadera de volvernos a rearmar. Si tuviéramos ambición conjunta, capacidad de proyectar. Si pudiéramos reivindicarnos con nosotros mismos.

Si definitivamente, privados de todo egoísmo, hubiéramos podido vivir para el otro. Y morir por el otro.


Si un día el sueño termina
es porque el amor para siempre no existe
me voy a morir maldiciendo ese día,
pero disfrutando lo que ya me diste

Me consuelo con una canción, me sostiene una simple razón:
las mejores peores palabras te las dije yo


domingo, 1 de mayo de 2011

Homenaje.

La historia es el más grande conjunto de aberraciones, guerras, persecuciones, torturas e injusticias, pero, a la vez, tierra sobre la cual millones de hombre y mujeres se sacrifican para cuidar la vida de los demás. Ellos encarnan la resistencia.

Se trata de saber, como dijo Camus, si su sacrificio es estéril o fecundo, y esto debemos decidirlo nosotros. Para ello debemos reconocer el lugar donde oponer resistencia, donde palpar el espacio de libertad que está a las puertas.

La primera tragedia que debe ser urgentemente reparada es la desvalorización de sí mismo que siente el hombre, y que conforma el paso previo al sometimiento y la masificación. Hoy el hombre no se siente un pecador, se siente un engranaje, lo que es trágicamente peor. Y esta profanación puede ser únicamente sanada con la mirada que cada uno dirige a los demás, no para evaluar los méritos de su realización personal ni analizar sus actos, sino al modo de un abrazo que nos puede dar la alegría de pertenecer a una obra grande que nos incluya.

Es un puente que nos toca atravesar, un pasaje. No podemos quedar fijados en el pasado ni tampoco deleitarnos en la mirada del abismo. En este camino sin salida que enfrentamos hoy, la recreación del hombre y su mundo no se nos aparece como una elección entre otras sino como un gesto tan impostergable como el nacimiento de la criatura cuando es llegada su hora.

Los hombres encuentran en las crisis la fuerza para su superación. Así lo han demostrado tantos hombres y mujeres que, con el único recurso de la tenacidad y el valor, lucharon y vencieron a las sangrientas tiranías de nuestro continente. El ser humano sabe hacer de los obstáculos nuevos caminos, porque a la vida le basta el espacio de una grieta para renacer. En esta tarea lo primordial es negarse. Defender, como lo han hecho heroicamente los pueblos ocupados, la tradición que nos dice cuanto de sagrado tiene el hombre. No permitir que se nos desperdicie la gracia de los pequeños momentos de libertad que podemos gozar: una mesa compartida con gente que queremos, una caminata entre los árboles, la gratitud de un abrazo.

El mundo nada puede contra un hombre que canta en la miseria.

De " La resistencia"


Un sincero y humilde homenaje a un incansable luchador.

Un ejemplo de vida. Un verdadero "resistente".




domingo, 24 de abril de 2011

Actualmente, tengo necesidad de todas tus formas.

De tu sencillez.

De tu humildad.

De tu inmensa sinceridad.

De tu honestidad. De tu confianza.

De tu aguda inteligencia.

De tu fortaleza.

Y sobretodo, de tu autenticidad.

Necesito tan solo de tu existencia.

De tu persona.

De tu eterna compañía.

De tu retórica.

Necesito tu aliento.

Porque simplemente te necesito.

Y porque tengo el alma atada por esta necesidad.